ESPERA, SOLO UN MOMENTO

Una noche de mal sueño. No son pesadillas. Había despertado muy de madrugada, no entendí de pronto porque, escuche que si despertabas a esa hora era por la simple razón de que pues, como dijo mi madre ¨Hija estás angustiada, eso es todo no te armes un cuento¨. No podía evitarlo. No pensaba en otra cosa que no fuera ese día, sabía muy bien que no me aportaría en nada hacerlo. De hecho ya otras noches lo había hecho. Ya otras tardes lo había contado. Ya a otras personas se lo había mencionado. 

No está de más. Es cierto eso, de lo que todo el mundo dice, si no lo dices, si no lo piensas, si no lo cuentas habrá sido como si eso que no debo recordar más, nunca hubiera sucedido. Y así debía seguir, estando solo mis recuerdos más inconscientes, esos que solo toman poder cuando mis ojos están cansados. Pero, pienso en que sí es cierto ello, entonces por defecto el hecho de repetírmelo en madrugadas, hablarlo en parques con ¨amigos¨, abrirles las ventanas, dejar sin seguro la puerta de mi inconsciente para que salgan a pasear de noche cerca de mi almohada. Dejarlos susurrar todo. Verlo de frente a los ojos, y aunque sea ya muy tarde y mi madre esté en la otra habitación no lo piense dos veces y mantenga mi vista en ellos. Puedo verlo claramente. 
Creí poder solo con ellos. Son fuertes y me toman de los brazos, no dejan que me cubra las orejas. Quieren que escuche todo. Cada palabra. Lloré desconsolada, mi madre no corrió por mí. 
- Hola... ¡wow! No sé que decirte...
- No importa qué, dime que pasa por tu mente. Así se empieza...
- Y si lo único que pasa por mi mente ahora mismo, eres tú ?
- No me conozco, y yo a ti mucho menos ...
-  ¿Y no te gustaría?
- No 
- Ah pero si quieres saber que pasa por mi mente, ¿verdad?
- Ya no.
Ese día fue, aunque no lo pareciese, muy especial para mí. Mi mente me pide a gritos que lo